Materiales para las puertas de cocina, diseño y dureza
El aspecto y calidad de cualquier cocina va a depender directamente de los materiales y el diseño que ofrezcan las puertas de los muebles usados para su montaje. Cuando se adquiere una vivienda en bruto o se piensa remodelar la cocina de la actual, hay que pensar en los tipos de materiales, los más usados y sus precios para acertar con la decisión.
La elección de los materiales de las puertas de cocina será una de las cuestiones que se habrán de solucionar con prioridad para llevar a cabo un presupuesto. Los más demandados son, de mayor a menor coste, los de madera, laca, PVC y los laminados, aunque no son los únicos.
A la hora de decidirse por un material para puertas u otro hay que considerar diferentes factores, y aunque el precio es fundamental, hay otros que son también muy importantes. Y es que según su composición tendrán unas características que las harán más o menos apropiadas para el uso que se le vaya a dar al conjunto de muebles.
Estas son las características de los principales materiales usados para las puertas en los muebles de cocina:
La madera
Posiblemente sea el tipo de puerta más cara, pero también la que más presencia y belleza aporta a estos espacios. Como norma general, las puertas fabricadas con este material son de madera, aunque también se pueden encontrar combinadas con contrachapado. La madera aporta a las cocinas calidez y buen gusto. Especialmente indicadas para aquellos que gustan de los ambientes naturales, rústicos y tradicionales.
La madera, si es de buena calidad, puede durar mucho tiempo, siglos incluso. Su tratamiento es muy simple, bastará con una limpieza frecuente con productos apropiados, como limpiadores de madera y ceras.
Sus posibilidades estéticas son enormes, puesto que tiene una gama muy amplia de colores, acabados y tonos de barniz. En cuanto a la procedencia de la misma madera, se puede elegir entre las más tradicionales, como el haya, el mukali o el cerezo.
La madera, como cabe imaginar, posee los beneficios característicos de un producto ecológico si procede de bosques certificados que aseguran la repoblación.
El lacado
Con un aspecto muy parecido a la madera, este tipo de puertas se fabrican con tableros de Medium Density Fireboard o MDF, que son aquellos que se obtienen gracias a la aplicación de presión y calor a fibras de madera seca mezclada con adhesivo. Es un material más económico, pero también más sensible a la humedad, ya que se le suelen aplicar varias capas de pintura de Poliéster y un acabado que puede ser Poliuretano o Acrílico.
Para Cocinas en Sevilla muchos prefieren el acabado de la laca porque presenta una superficie uniforme y satinada, con un enorme y variada cantidad de posibilidades en cuanto a sus acabados, colores y tipos de puertas, brillantes, texturadas, mates, decapadas, envejecidas. Con diseños modernos o clásicos.
Las desventajas son la facilidad con la que se puede rayar, la poca resistencia a los golpes, la poca durabilidad, pero, para contrarrestar estas debilidades está su bajo precio y la posibilidad de una fácil reparación.
Las puertas rechapadas
Al igual que las anteriores están construidas con tableros de partículas de madera, pero en esta ocasión recubiertos por una chapa de madera muy fina, de tan solo 0,5 mm de espesor. Para los cantos, se usa chapa del mismo tipo de madera unida con un fuerte adhesivo termofusible. En los acabados se suelen usar barnices de poliuretano y acrílicos, y también los más ecológicos barnices al agua.
El PVC o puertas polilaminadas
En este caso se trata de puertas fabricadas con los mencionados tableros de MDF, pero recubiertos de una capa de Prolicloruro de Vinilo (PVC) o polilaminado. Este plástico de recubrimiento es fácilmente moldeable, con la fabulosa propiedad de adaptarse a la perfección a los diseños más complejos. Son muy fáciles de limpiar, cubre tanto los cantos como los mecanizados de su interior y son bastante resistentes a la humedad.
Laminadas o estratificadas
Estas puertas están fabricadas con tableros de partículas de madera, conocidas como aglomerados, recubiertos por una lámina estratificada, que es un laminado de alta presión, comúnmente conocido por su nombre comercial; Formica. Es una de las puertas más usadas por su precio, de los más reducidos, y por la gran resistencia que ofrece a los golpes.
Por otra parte, son muy fáciles de limpiar y sus colores aguantan muy bien el paso del tiempo, con gran resistencia a las rayaduras, al calor y por ser muy impermeables. También ofrecen muchas posibilidades en cuanto a colores y texturas.